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El pasado día 4 de Mayo se entregaron los premios del XL Certamen Antonio Robles, de todas sus categorías, cuento, relato, poesía, dibujo y cómic dirigido a los alumnos de primaria, ESO y Bachillerato de los centros educativos del Distrito de Fuencarral-El Pardo. En él participaron 31 centros y cerca de 4800 alumnos en sus distintas categorías.
La entrega de premios se realizó en el centro cultural Alfredo Krauss y como muchos ya sabéis Lucia que cursa 1º de Primaria y Julia que cursa 4º, fueron las ganadoras del premio de relato corto de su curso.
Ambas recibieron la noticia en el colegio y para ellas fue una gran alegría, pero sobre todo salían emocionadas por cómo las habían tratado sus compañeros y como según se iban enterando alumnos de otros cursos las felicitaban y les daban la enhorabuena e incluso aplausos espontáneos en el comedor. Estaban felices y emocionadas.
La entrega de premios la vivieron con una gran emoción y además puesto que ambas familias nos conocíamos fue una doble alegría.
Como padres, que una hija tuya gane un premio en el que participan tantos niños, es un orgullo pero cuando ves todo el cariño que recibe de sus compañeros, cuando tu mismo lo recibes de los padres de esos niños, demuestra que en nuestro colegio existe un gran sentimiento de familia y quizás ese sea el mayor premio de esta experiencia. Muchas gracias a todos.
Y queremos agradecer al nuestro colegio y a los profesores que promuevan la participación en este tipo de eventos, ya que hay cualidades y facetas de nuestro hijos que sólo aparecen con estas iniciativas, en las que les dejamos ese espacio de libertad para expresarse de la manera que sea. Y al AMPA darle las gracias por dejarnos compartir con el resto de padres nuestra experiencia y sobre todo el relato de nuestras hijas.
Escrito por: Carmen, madre de Julia
Puedes disfrutar de sus maravillosos relatos a continuación:
“Siena y las aventuras por la Tierra”, autora Lucia Martín Fernández.
“Las selvas en paz”, autora Julia Fernandez Gómez
Érase una vez una selva en la que los animales vivían en paz y se ayudaban los unos a los otros.
Un día, una de las razas de aquellos animales fue evolucionando y se convirtieron en unas personas egoístas y que se creían superiores que el resto de las especies.
Poco a poco fueron destruyendo la selva y dañando la naturaleza, los animales no hacían nada porque no eran rivales para el humano, muchas especies se extinguieron y otras se alejaron para protegerse.
La selva estaba cada vez más sucia y dañada, sus plantas estaban desapareciendo por momentos, sus ríos estaban cada vez más sucios y su aire era cada vez más gris.
Un día se formó una gran tormenta, el cielo se llenó de nubes negras y parecía que se había hecho de noche. Comenzó a llover y todos los animales se escondieron en sus refugios. Mientras algunos trataban de esconderse les cayó un rayo.
Esos animales evolucionaron y se convirtieron en Los Guardabosques.
Los Guardabosques eran: un tigre, que tenía un super rugido y creaba viento y así limpiaba el aire contaminado.
Un hipopótamo que al meterse en el agua podía transformarla en agua clara y limpia, así los animales podían volver a beber de ella.
Una abeja que tenía supervelocidad y conseguía llevar polen a todas partes en unos segundos y que crecieran plantas nuevas muy rápidamente.
Un gorila que tenía superfuerza y aplastando la basura la hacia desaparecer. Pero, aunque su esfuerzo había mejorado su selva, no era suficiente.
Un día Los Guardabosques fueron a convencer a los humanos para que no tiraran basura a la selva, pero los humanos se negaban a dejar de utilizar las bolsas de plástico, sus coches, sus fábricas, sus latas…
Los Guardabosques no se iban a rendir tan fácilmente, convencieron a los humanos de que hay formas de vivir sin contaminar, usando transporte público, utilizando menos plástico y más vidrio, cosas de varios usos y reciclando la basura.
Así los Guardabosques y los humanos consiguieron poco a poco salvar la selva y el planeta.
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